Siesta de Emergencia
Ser un cachorro no es todo diversión y juegos, ¡es un trabajo a tiempo completo! Este pequeñín lo dio todo cavando un hoyo en el jardín, pero antes de mucho, el agotamiento se apoderó de él. Ni siquiera llegó a entrar en casa antes de desplomarse en la hierba para una siesta de emergencia. Claramente, vive bajo la regla: trabaja duro, duerme la siesta aún más duro.
Desde interminables juegos de buscar hasta masticar todo lo que está a la vista, el horario diario de un cachorro puede ser francamente agotador. Así que, ¿quién puede culparlo por necesitar una siesta rápida entre actividades? Esa carita de paz lo dice todo: soñando con huesos, caricias en la barriga y hoyos sin terminar.
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