Un regreso reflexivo
El camionero apagó el motor, el zumbido de la máquina se desvaneció en el silencio mientras salía de su cabina una vez más. Tenía las manos casualmente metidas en los bolsillos, un gesto tan seguro que parecía cambiar la energía en el aire. La multitud, que había estado zumbando de ruido, de repente cayó en una quietud silenciosa, con su atención ahora completamente fija en él. Era como si su sola presencia comandara su concentración, una autoridad tácita que atraía a todos.
Su calma tenía una fuerza gravitacional propia, atrayendo todas las miradas hacia él. Fuera cual fuera la decisión que había tomado, estaba claro que estaba listo para actuar en consecuencia, y la tensión era palpable. El ruido estridente de Jake y Travis pareció desvanecerse en el fondo, sus intentos de causar problemas ahora irrelevantes frente a algo mucho más cautivador. El momento había cambiado, y todos en la multitud podían sentirlo: un nuevo capítulo se estaba desarrollando ante ellos.
