No se encontraron coincidencias


El Dr. Morgan miró fijamente la pantalla mientras parpadeaba: “No se encontró ninguna coincidencia”. Actualizó la base de datos y lo intentó de nuevo, luego otra vez, nada. Su ritmo cardíaco se aceleró ligeramente. No había ninguna entrada en los registros caninos domésticos que coincidiera con la muestra. El pelaje no pertenecía a ninguna raza conocida o linaje mixto. Se frotó las sienes, sintiendo una extraña mezcla de frustración y creciente alarma.

Abrió una base de datos secundaria, esta para casos veterinarios inusuales, esperando encontrar al menos una conexión vaga. “Vamos, tiene que haber algo”, susurró. Pero cada búsqueda lo llevó a otro callejón sin salida. Cuanto más buscaba, más se daba cuenta de que esto no iba a ser fácil, ni normal.

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