Amabilidad y Cierre

Al final, Elara quería más que justicia: quería paz. “Nunca se trató solo de nosotros”, dijo. “Se trata de proteger quién soy y nunca dejar que otra persona me lo quite”.

Más despacio, Caden asintió, finalmente comprendiendo la profundidad de su convicción.

Para Elara, esto no era venganza, era liberación. “Adiós, Caden”, dijo suavemente, cerrando la puerta detrás de ella.

Y con eso, dio un paso adelante, dejando atrás el pasado y abrazando un futuro de claridad, fuerza y una libertad duramente ganada.

Advertisements
Advertisements