Llevando el «Sin Objetos Metálicos» al Extremo
Los aeropuertos son conocidos por sus rigurosos controles de seguridad, pero este señor llevó la preparación a un nivel completamente nuevo. De pie con confianza, solo con su ropa interior rosa y calcetines, maletín en mano, está claramente comprometido a evitar cualquier retraso en el detector de metales. Tal vez ha tenido demasiados encuentros con cinturones que pitan y monedas olvidadas; esta vez, se aseguró absolutamente de que no hubiera problemas.
Lo que hace que este momento sea realmente invaluable es la normalidad descarada con la que se mantiene en la fila, como si esto fuera un martes más por la mañana. El cartel de arriba que dice «POR FAVOR, SIN BROMAS» añade una deliciosa capa de ironía a toda la escena. Ya sea una protesta, una obra de arte o simplemente una peculiaridad personal, es seguro decir que nadie en esa terminal olvidará a este viajero pronto.