Un Pequeño Descanso
Este pequeñín parece haber tenido un día largo en la “oficina de bebés” y necesitaba un momento para relajarse. Con los codos firmemente apoyados en el borde de un sofá y los pies apenas tocando el suelo, ha adoptado la postura perfecta para una máxima relajación y un mínimo esfuerzo. Su pijama verde con motivos de hojas solo añade encanto, mezclando comodidad informal con una postura extrañamente madura para alguien tan diminuto.
Mientras los adultos se doblan y estiran en todo tipo de posiciones raras para mirar pantallas, este bebé ha dominado sin querer el arte de estar de pie de forma extraña con una expresión de tranquila contemplación. Ya sea que esté observando la habitación, esperando un tentempié o simplemente disfrutando de la sensación blandita del sofá bajo sus brazos, el momento es perfecto. Es la prueba de que incluso los más pequeños entre nosotros pueden adoptar una pose que vale la pena detenerse a contemplar.
